UN BREAKUP CON EFECTO REBOTE.

¿La manzana de la discordia siempre fue el Big, Beautiful Bill o lo fue cuando se dieron cuenta que afectaba sus intereses? Puedes sacar tus conclusiones, lo cierto es que el toma y dame (con trapitos al aire) entre Elon Musk y Donald Trump ya está dejando heridas: Tesla, Space X y Wall Street, que mira de reojo. Pero… además del show en X ayer, la economía también se movió esta semana: reporte de empleo, housing market, aranceles y mención especial a nuestra querida IA.

EN CUENTA.

EL SAQUEO A REDDIT.

Si pensabas que la carrera de la inteligencia artificial era solo cosa de modelos cada vez más listos, esta semana quedó claro que es también —y sobre todo— una guerra de datos. Y en esa guerra, Reddit acaba de dar el primer golpe. 

Anthropic no es OpenAI, pero casi. Si ChatGPT es el iPhone de las IAs, Anthropic —creadora de Claude— es como Samsung: poderosa, ampliamente usada, muy admirada en el sector, y ahora también muy cuestionada. Esta semana, Reddit demandó a Anthropic por haber supuestamente accedido a su plataforma más de 100,000 veces desde julio pasado, entrenando sus modelos con contenido que, según Reddit, vale “miles de millones de dólares.” La ironía es que Reddit sí ha vendido sus datos de forma legal: tiene acuerdos con Google y con OpenAI por al menos $60 millones anuales cada uno. A Anthropic, en cambio, no le dio permiso. Y eso cambia todo.

• El lado militar de la historia. Y justo cuando la demanda sale a la luz, Anthropic lanza Claude Gov: su nueva versión de IA para agencias de defensa e inteligencia de EE.UU. El modelo compite directamente con ChatGPT Gov de OpenAI y tiene menos restricciones cuando se trata de procesar información clasificada. Es decir: la misma empresa que hoy enfrenta acusaciones por haber entrenado IAs con contenido ajeno, está también entrando con fuerza en el negocio de la IA para usos militares.

• Nada nuevo bajo el sol (de los contratos millonarios). El movimiento de Anthropic sigue un patrón que ya vimos con Microsoft, Amazon y Google: ofrecer versiones personalizadas de IA para gobiernos, pese a las controversias sobre su uso. Microsoft y Amazon enfrentaron protestas internas y externas por proyectos con el Pentágono e Israel; ahora Anthropic se suma al juego. El atractivo es simple: contratos federales enormes, en un mercado que aún opera sin una regulación clara.

Mucho en juego. Lo que esta demanda y este nuevo producto revelan es un mismo patrón: en la economía de la IA, los datos valen oro, y las empresas más ambiciosas no se detendrán ante debates éticos si eso les abre la puerta al negocio gubernamental.

¿El resultado? Un ecosistema donde las mismas empresas que dicen querer proteger la humanidad entrenan sus modelos en datos que no siempre fueron ofrecidos y venden esos modelos a los actores con más poder. Bienvenidos a la nueva economía de la inteligencia artificial.

ECONÓMETRO.

TODOS SUFRIMOS CON EL BIG, BEAUTIFUL BILL.

LA GRAN DEUDA DEL MEGAPROYECTO FISCAL.

El megaproyecto fiscal de la Casa Blanca podría sumar $2.4 billones al déficit en 10 años, según la Congressional Budget Office. ¿El costo humano? 10 millones de personas perderán su seguro médico para 2034, por cambios en Medicaid y nuevos requisitos de trabajo. También se perderían subsidios del Affordable Care Act. En total, hasta 16 millones podrían quedar sin cobertura. ¿Promesas fiscales? Sí. ¿Costo social? También.

TESLA Y SPACE X PAGAN LOS PLATOS ROTOS.

Las acciones de Tesla cayeron más de 14% en un solo día tras el enfrentamiento en X de Elon Musk y Donald Trump por el nuevo plan fiscal. Otros 22.000 millones de dólares en contratos de SpaceX están en riesgo por el breakup. Elon criticó los recortes a incentivos para autos eléctricos expuestos en el Big, Beautiful Bill y hasta insinuó que el presidente aparece en los Epstein files. Trump respondió asegurando que rompería todos los contratos federales firmados con Elon. El toma y dame le costó a Tesla su desplome sin precedentes. ¿Se reconciliarán? Wall Street espera que sí. Por el bien de todos. 

SUBEN NUEVOS EMPLEOS EN MAYO, PERO NO TODOS ESTÁN CONTENTOS.

El reporte de empleo de mayo sorprendió (para bien): 139,000 nuevos puestos, más de lo esperado. Pero… siempre hay un pero. Las cifras de marzo y abril fueron corregidas a la baja, y el empleo federal sigue cayendo (solo 22,000 contrataciones en mayo). El desempleo se mantiene en 4.2%. Nada catastrófico, pero los analistas ya ven señales de fatiga laboral, justo cuando la Reserva Federal está buscando pistas para decidir si baja o no las tasas de interés.

RESPIRITO EN EL HOUSING MARKET: LOS MORTGAGE RATES BAJAN.

Después de más de un mes de subidas consecutivas, las tasas hipotecarias bajaron apenas a 6.85% para préstamos a 30 años (eran 6.89% la semana pasada), según Freddie Mac. La de 15 años también bajó, a 5.99%. ¿Es el inicio de un alivio real para quienes sueñan con casa propia? Nope. Analistas dicen que los rates seguirán intermitentes en lo que resta de año, mientras el inventario mejora.

CONTRATACIONES EN META CON OJOS DE ROBOT.

La compañía de Mark Zuckerberg quiere que la IA no solo te vigile en el feed, sino también cuando buscas trabajo. Un documento interno revela que planean usar inteligencia artificial para evaluar entrevistas, ayudar con preguntas, organizar agendas y hasta calificar qué tan buenos son sus propios entrevistadores. También automatizarán la parte administrativa: transcripciones, matching, y posts redundantes. ¿Objetivo? Contratar más rápido, con menos sesgos… y con menos humanos.

FINANZAS AL DETALLE.

EL RIESGO DE SUBESTIMAR.

¿Te gustan los tacos? Bueno, a Wall Street también, pero en versión bursátil: TACO = Trump Always Chickens Out. Así le llaman ahora a una estrategia de inversión que asume que el presidente siempre se echa para atrás con sus amenazas comerciales si el mercado se asusta. El problema: eso puede convertirse en simples ilusiones. 

Desde que arrancó su segundo mandato, el Trump Trade mutó de promesas de infraestructura y reducción de regulaciones a un menú diario de tarifas impredecibles. El 2 de abril, por ejemplo, el mercado se fue para abajo tras el anuncio de nuevas tarifas (o Liberation Day), y luego se recuperó cuando pareció que las cosas se enfriaban. Este ciclo se repite y se repite. 

¿Y cómo te afecta a ti? Fácil: tarifas más altas significan productos importados más caros, más inflación por la subida en los costos de importación, menos margen para la Reserva Federal, y, en resumen, más presión en tu bolsillo. Porque sí, los chips que usa tu teléfono, la ropa que compras en SHEIN, y hasta ciertos alimentos, todo eso baila al ritmo de esta guerra comercial. 

JP Morgan ya dijo que viene una agenda intensa de expiraciones de tarifas y renegociaciones antes de que acabe el año. Y algunos analistas advierten que tanta confianza en que Trump “no va en serio” puede ser peligrosa. Si el mercado lo sigue tratando como un bluff constante, es probable que quiera demostrar lo contrario... y ahí nos va a doler a todos.

Así que, por ahora, si ves a los inversionistas comerse este TACO con tanta tranquilidad, tal vez nos deberíamos preguntar: ¿y si esta vez no hay chicken out?

ANTES QUE TE VAYAS.

TE RECOMENDAMOS:

📉 El sector servicios se apaga (y eso no es menor). El PMI de servicios en Estados Unidos cayó a 49.9 en mayo, su primer nivel en contracción desde junio de 2024. Más de dos tercios de la economía está en pausa mientras las empresas enfrentan precios más altos y políticas comerciales impredecibles. Spoiler: la incertidumbre no es buen terreno para invertir.

🪙 Stablecoins entran al Congreso y al mercado de T-Bills. Una nueva ley federal busca regular los stablecoins, acercándolos al sistema financiero tradicional. Esto podría aumentar la demanda de bonos del Tesoro a corto plazo, pero también traer más volatilidad si el mundo cripto se sacude. Porque sí, ahora tus impuestos podrían bailar al ritmo de la blockchain.

🤖 ¿Regulaciones estatales sobre IA? En pausa por una década (quizás). El Congreso evalúa congelar por 10 años cualquier ley estatal que regule inteligencia artificial. La idea es evitar un caos regulatorio, pero la medida podría invalidar leyes sobre inteligencia artificial en contratación, salud, deepfakes y privacidad. Todo para “no asustar a la innovación”, dicen. 

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